Historia La historia de la churrería está estrechamente ligada a la del propio churro, cuya receta básica —harina, agua, sal y aceite— data de siglos atrás y tiene orígenes discutidos. Algunas teorías apuntan a que los churros fueron creados por pastores españoles que, al no tener acceso a hornos, desarrollaron una masa fácil de freír en sartenes sobre el fuego. El nombre “churro” podría venir de la raza de oveja Churra, por la forma curvada de sus cuernos, que recuerda a la del churro tradicional. Otras teorías sugieren una influencia oriental, concretamente del youtiao chino, que fue traído a Europa por los portugueses y adaptado localmente, cambiando la sal por azúcar y la forma por la de estrella.