Origen y formación La versión más aceptada sobre el origen de los garífunas comienza en 1635 cuando dos barcos españoles que transportaban esclavos africanos naufragaron cerca de la isla de San Vicente, en el Caribe. Los esclavos que lograron sobrevivir escaparon y nadaron hacia la isla, donde fueron inicialmente sometidos, pero luego se mezclaron con los pueblos caribes locales, quienes les ofrecieron protección. Esta unión dio origen a una nueva cultura que en lengua garífuna significa “personas que comen yuca” y que fuera llamada por los españoles “caribes negros”.