Historia El título Tennō —que literalmente significa "Soberano Celestial"— encuentra sus raíces en la cosmogonía sintoísta, específicamente en el Kojiki (712 d.C.) y el Nihon Shoki (720 d.C.), los textos más antiguos de Japón. Según estos relatos, el Tennō desciende de la diosa del sol Amaterasu Ōmikami, quien entregó los Tres Tesoros Sagrados (el espejo Yata no Kagami, la espada Kusanagi y la joya Yasakani no Magatama) a su nieto Ninigi-no-Mikoto, ancestro del primer Tennō histórico, Jinmu (660–585 a.C., según la tradición). Esta conexión divina estableció al emperador como un arahitogami (神現, "dios en forma humana"), un concepto que perduró hasta el final de la Segunda Guerra Mundial.